Oíd bien, chicas, porque sólo lo diré una vez, y son sólo cuatro palabritas... Los hombres son simples.
No se les puede adiestrar. Eso de que son de Venus, o de Marte, es una pérdida de tiempo y de dinero. Porque en el fondo, lo que más les interesa es el físico. Nadie se enamora a primera vista de nuestra interesante personalidad, se enamoran de nuestras tetas y nuestro culo, y siguen con nosotras por lo que estamos dispuestas a hacer con eso.
Si queréis conservar a un hombre no necesitáis diez pasos, sólo uno. Y se llama: Una buena mamada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario